Los insecticidas son compuestos químicos a base de sustancias expulsadas por animales, utilizado para matar insectos normalmente, mediante la inhibición de enzimas vitales. Es un tipo de biocida.
Características de los insecticidas
- Gran especificidad. El producto sólo afecta al organismo, daña dejando indemnes al resto de seres vivos y al medio ambiente.
- Baja toxicidad en humanos. El producto reviste un riesgo bajo tanto para sufrir intoxicaciones agudas como a exposiciones a bajas dosis.
- Baja dosis letal. El insecticida es efectivo con poca cantidad.
- Bajo coste. El producto tiene que ser barato de bajo costo.
- De característica latente. El insecticida permanece en el lugar durante un período de tiempo matando a todo lo que se cruza.
Estas características raramente están presentes en un mismo producto.
Forma de actuación
Los insecticidas pueden hacer acción sobre uno o diferentes de los estados de desarrollo del artrópodo y se consideran ovicidas, larvicidas y adulticidas respectivamente si eliminan los huevos, la larva o el adulto.
Los insecticidas pueden entrar en contacto con el insecto a través de la alimentación cuando tocan al insecto o vuelan en aire contaminado, lo más habitual, de forma combinada. La forma más moderna y efectiva de actuación, en caso de plantas, es la introducción del insecticida en el interior de la planta y a través de los vasos conductores repartirse por toda la planta y la convierten en venenosa para la plaga. Así tenemos:
- Insecticidas de ingestión
- Insecticidas de contacto
- Insecticidas combinados de ingestión y contacto
- Insecticida sistémico
La acción del insecticida sobre el organismo puede ser la muerte a corto o medio plazo. A veces, provoca que dejen de comer o impiden la metamorfosis del insecto que a más largo plazo implica la muerte.