Los fertilizantes de liberación controlada se emplean normalmente en la industria de los viveros para fertilizar árboles y arbustos. Muchos productores también los utilizan en crisantemos, plantas vivaces y otros cultivos de exterior. Sin embargo, por lo regular no son empleados en invernaderos, ya que los fertilizantes solubles en agua son de fácil aplicación y se pueden aplicar en dosis variadas dependiendo de los requerimientos de cada cultivo, el clima y el tamaño de las plantas. No obstante, en la actualidad existe una tendencia en la aplicación de fertilizantes de liberación controlada en cultivos de invernadero.
¿Qué son los fertilizantes de liberación controlada?
Se trata de fertilizantes solubles en agua revestidos por un polímero, su forma es de gránulos redondos. El revestimiento de polímero tiene pequeños orificios por donde pasa el agua hacia el gránulo y lo disuelve para liberar lentamente el fertilizante. Los fertilizantes de liberación controlada son sometidos a distintos análisis NPK y pueden o no contener micronutrientes. Estos fertilizantes se caracterizan por su tiempo de liberación y se expresan en meses, días o tipo. El tiempo de liberación de estos fertilizantes es basado en temperaturas promedio de 21 – 25˚C, dependiendo de cada fabricante.
Para que comience la liberación de esta clase de fertilizante se requiere humedad. Si el sustrato de cultivo se seca, puede reducir considerablemente el nivel de fertilizante liberado. Por otra parte, la temperatura ejerce la mayor influencia en la liberación de estos fertilizantes. Los fertilizantes de liberación controlada trabajan bien en temperaturas normales para los cultivos, pero si dicha temperatura es inferior a los 10˚C, casi no habrá liberación de fertilizante, y si supera los 32˚C, la liberación será excesiva.
Cómo aplicar fertilizantes de liberación controlada
Un fertilizante de liberación controlada puede aplicarse en la superficie, o bien, puede incorporarse al sustrato de cultivo antes de plantar. En el primer caso, este se coloca sobre el sustrato de cultivo después de plantar. La desventaja de este tipo de aplicación consiste en que los gránulos pueden caer fuera del recipiente ante cualquier fuerza externa. Además, si el agua es aplicada más rápido de lo que es absorbida por el sustrato, los gránulos flotarán y serán arrastrados hacia fuera de la maceta.
El segundo método de aplicación, la pre-incorporación, radica en mezclar el fertilizante directamente con el sustrato. Las ventajas para el productor de pre-incorporar un fertilizante de liberación controlada son: la fácil aplicación y que los gránulos permanecen en el sustrato. Finalmente, el sustrato sobrante con fertilizantes de liberación controlada deberá ser utilizado durante el mes posterior a la fabricación, así se evitará que las sales del fertilizante se acumulen excesivamente en el sustrato no utilizado.
Contacto de ZALSA Abonos y Fertilizantes Valladolid
Si desea hacer preguntas acerca de los fertilizantes de liberación controlada o si requiere asesoría para su aplicación, no dude en contactar con ZALSA Agroservicios Valladolid enviando sus datos a través de nuestro FORMULARIO DE CONTACTO.